CAPITULO 20

NARRA TAYLOR

Salí de la oficina y fui directo al elevador para bajar al último piso eh ir a mi casa, una vez ya en el último piso camine a la salida, me despedí de Sara que se encontraba en su puesto de recepcionista del otro lado del mostrador, ella era joven tenía apenas veintidós años. Subí a mi automóvil el cual se encontraba parqueado en el estacionamiento, una vez ya adentro lo encendí y arranque rumbo a mi casa; quería ver a Lisset, pero era temprano aun para verla, no me  importo y fui directo a casa de Claus.

Baje de mi automóvil ya cuando me encontraba a unos cuantos metros de la puerta principal sentí que algo me jalo mi pantalón, voltee y era el pequeño Monky  entre mis piernas jalándome el pantalón, me agache para cargarlo.

-¿Por qué me jalas el pantalón?, ¿a caso me quieres dejar en bóxer? –lo tenía levantado mientras le hablaba. Solo me miro y paso su lengua por toda mi cara para después dar un pequeño ladrido –tomare eso como un sí – toque el vidrio de la puerta que tenia la entrada

-hola –asomo su cabeza y después dejo ver su cuerpo mientras me sonreía, tenía una actitud de niña pequeña –oye oye –me miraba mientras me hablaba

-¿mande? –pregunte dejando al pequeño cachorrito en el suelo

-hola –sonrió. No negare que en ocasiones como estas es cuando empiezo a preocuparme de las actitudes de Aly, espero no sea hereditario, no quiero una novia loca y menos hijos así

-hola, ¿Dónde está mi novia? –pase a la casa. Monky me seguía mientras que Aly se quedaba serrando la puerta

-se fue con un chico, muy guapo por cierto –camino a la cocina y yo me quede paralizado, ¿un chico? ¿Guapo?

- como que un chico y guapo – corrí detrás de ella. Me miro en cuento sintió mi mano en su brazo

-si un chico, creo que era su amigo pero según ella me dijo el quería con ella –

-¿Quién quería con quien? – pregunto Lisset  llegando a mi lado, voltee y mire a Ally que solo sonrió burlonamente y se escabullo por la cocina. En algún momento esta niña traviesa me las pagara en su debido momento

-hola amor – la mire sonriendo para después depositar un beso en sus labios -¿te dejan salir? – la mire y después cargue al pequeño Monky que  no dejaba de jalarme el pantalón

-claro, solo deja y le aviso a Ally – solo vi como desapareció por el camino asía la cocina

Me quede un rato jugando con el hijo de Claus, a los pocos minutos llego Lisset y nos fuimos al parque a pasear a Monky. Corría de un lado al otro era gracioso verlo asi

- su madre nunca lo saca – reí al verlo atorado en un arbusto

-lo sé – miro al monky y fue directo a ayudarlo – pobre, mira madamas como estas – lo miro seria. El perro solo se limitaba a sacar la lengua mientras la miraba

- deja te ayudo – me agache para poder sacarlo de  los arbustos tenia hojas atoradas en su pelaje

- tu madre cuando vea lo sucio que estas me va a matar- Lisset le hablaba al perro como si entendiera todo lo que le decía

- vamos a comer algo ¿te parece? – la mire mientras tomaba al cachorro

-claro pero me compras un gran vaso de refresco –

-claro, pero ¿Qué se te antoja comer? – llegamos hasta donde se encontraba el automóvil, abrí la puerta para que entrara, cosa que hizo

- quiero que me compres de comer… - guardo silencio por unos minutos para después mirarme – quiero comida china, pero para llevar no podemos dejar aquí a mi sobrino – miro a Monky –verdad que no te puedo dejar aquí solo precioso –

Me daba risa la forma en que le hablaba al perro, conduje hasta el restaurante de comida china que me gusta, me estacione y baje para pedir la comida, una vez dentro me senté en una de las mesas esperando que llegara alguna persona para atenderme; fue en cuestión de minutos que llego una chica para tomar mi pedido.

Salí, con las bolsas en mi mano y camine directo a mi automóvil, una vez dentro le di un beso corto a mi novia y continúe con mi camino directo a mi casa.

-creo que no hay nadie – se asomo por la ventana viendo hacia el patio –oye ¿Dónde pongo a mi sobrino? –

-vamos a meterlo, porque mis perros capas que se lo comen y problema en el que nos metemos con Claus – sonreí al igual que ella. Esa hermosa sonrisa que tiene me vuelve loco, es hermoso como se curvean sus labios

- ¿Qué tanto me vez? – pregunto al momento que se dio cuenta de no paraba de mirarla, ¿y cómo hacerlo si con esa sonrisa cautiva a cualquiera? Y eso me preocupa  -¿me vas a decir sí o no? –

- lo hermosa que es mi novia eso veo – le doy un beso en sus labios y ella solo se limita a sonreír

-ya mejor vamos adentro – salimos el automóvil y entramos a la casa, efectivamente no se encontraba nadie en la casa

NARRA GUSTAV

Después de cenar me fui con Georg a mi habitación para jugar videojuegos, estábamos jugando cuando perdí.

-te gane mi estimado Gustav, OTRA VEZ – eso ultimo lo remarco muy bien, solo lo mire y rodee los ojos

-si, bueno… no me importa ya me acostumbre a perder – deje de lado el control y me quite los audífonos

-hahahah – me miro eh hizo lo mismo que yo – oye Gus ¿te acuerdas de la amiga de mi prima? – me miro serio, ¿la amiga de su prima?... me pregunte por dentro, no recordé absolutamente nada

- no ¿Por qué? – Recordé una chica pelirroja – espera… ¿es la pelirroja de cabello rizado y tez blanca? – le pregunte mirándolo y moviendo mis ojos de un lado a otro, no recordé a nadie más, era la única chica que se me vino a la cabeza

-si ella, bueno ahora ya es rubia –hizo una pausa como recordando – si es rubia, bueno ella ¿se te hace guapa? –se volteo para mirarme. Guapa bueno, no lo negare si es guapa

-si ¿Por qué?-

-genial, porque le gustaste y casualmente vive acá hace como cinco meses y claro esta yo como buen amigo tuyo te ofrecí para que lo acompañes a una fiesta mañana la próxima semana – abrí mis ojos como platos al escuchar lo que Georg dijo

-¿hiciste una cita sin mi consentimiento? – lo mire seriamente, ni siquiera conocía el nombre de la chica

-vamos Gus, es guapa tiene más cuerpo que la ultima vez – sonrió mientras movía su cabeza diciendo “si”

- a ver para empezar ¿Cómo se llama? Porque yo no me sé su nombre -¿Cómo recordarlo? Si muy a penas y recuerdo su físico, Georg en algo tenía razón, era guapa por lo poco que puedo recordar de ella

- se llama Jocelyn -

- mira tiene nombre bonito y es guapa, pero yo no quiero salir con ella… es mas ni siquiera la hablo- tener que ir a una fiesta con una persona que no conozco y peor aun que lo hagan a mis espaldas  - a demás ¿qué clase de amigo hace eso?-

-uno bueno como yo, no lo veas como algo malo todo problema tiene su lado bueno –me abrazo pasando su brazo por mis hombros

-¿Cuál es ese lado bueno?- gire mi cabeza a un costado para mirarlo

-que te conseguí una cita. Gustav ¿hace cuanto tiempo que no sales con una chica? –Estaba a punto de contestar cuando me interrumpió – años así que no tiene nada de malo que salgas con ella-

-nada, es solo que no la conozco solo se su nombre y que le gusto y eso lo sé porque me lo acabas de decir –

-bueno ya Gustav mira mañana que la veas veras que es guapa y no te preocupes después me lo podrás agradecer – se levanto del sofá y camino a la puerta

-¿ya te vas? – lo mire después de que se volteo

-sí, voy a ver como se encuentra mi novia e hijo- sonrió orgulloso con lo último que dijo, solo sonreí

- si ya vete- me levante de mi lugar y fui directo hasta donde el empujándolo para que pasara del otro lado de la puerta – me saludas a tu novia y a tu hijo dile que se porte bien- serré la puerta en su cara

-eres un mal educado – escuche su reclamo del otro lado de la puerta

- no me importa, piensa lo que quieras no me afecta en nada- me tumbe en mi cama mirando el techo mientras escuchaba los gritos de Georg que se encontraba en el pasillo –ya vete me desesperas con tus gritos –

-entonces ábreme la puerta Gustav – golpeo y pataleo

-Gustav abre la puerta ahora mismo –esa voz era sin duda la de Jinny. Me levante para abrir la puerta y en cuanto lo hice entro empujándome mientras le jalaba a Georg la oreja izquierda –que les pasa par de idiotas, no es hora de estar gritando. Estaba dulcemente dormida cuando sus estúpidos gritos me despertaron – nos miro a ambos con seriedad

-es culpa de el – apunte a su novio mientras me miraba de mala gana – él fue quien empezó gritando-

-no me importa quien empezó tú te duermes –me apunto amenazante – y tu, te vas a dormir con él y en la misma cama, así que adentro por que como niños chiquitos los voy a tapar –

Jinny salió de la habitación, y nos dejo a Georg y a mi tapados con el edredón, parecíamos niños chiquitos, no quisimos discutir mas y nos dormimos.

NARRA TOM

Me levante en cuento sentí los rayos del sol en mi cara, escuche ruidos en el pasillo, me levante y salí a ver qué ocurría. Me encontré con Bill que reía a carcajadas y los G´s tenían una cara de pocos amigos.

-¿Qué les paso? Tienen una cara de… bueno no se dé que pero esta fea – me recargue en la pared con mis brazos cruzados y mirándolos

- fue culpa de Georg – dijo Gustav mientras se pasaba su mano por detrás de su cuello, realmente se veían muy mal

-si ahora yo tengo la culpa no – lo miro mientras se doblaba, al parecer tenia dolor de espalda – tu me serraste la puerta en la cara por mal educado-

-hay ya vas a empezar con lo mismo – lo miro eh hizo un gesto con su cara

-pero si fue tu culpa además si t…- Georg no alcanzo a terminar su frase ya que fue interrumpido por su novia

-es culpa de los dos, si no hubieran gritado esto no les estaría pasando par de idiotas –continuo con su camino

-ya cásate –susurro Bill mientras se reía por lo bajo. No pasaron ni tres segundos cuando Jinny le metió una cachetada. Mi hermano se quedo con la boca abierta y yo con mis ojos abiertos como platos

-¿Qué le pasa a esta loca?-pregunto mi hermano mientras se sobaba su mejilla derecha

-no lo sé, pero no está de humor por lo visto –respondí para después ir a la cocina

Baje las escaleras, pasando por la sala, el comedor hasta poder llegar a la cocina; una vez dentro mire a Jinny que picaba fruta mientras maldecía a su novio y amigo

-¿oye te sientes bien? –me recargue en la barra mirándola de frente

-no, desde ayer me empezó con un dolor de cabeza que no me deja en paz y para colmo Gustav y Georg no dejaban de gritar anoche, así que hice que durmieran juntos y si preguntas porque golpe a Bill es porque no estoy de humor para soportar las estupideces de nadie, ENTENDIDO –me miro enojada y directo a mi cara con el gran cuchillo filoso que tenía en sus manos

-si –fue lo único que pudo salir de mi boca mientras tragaba saliva, me moví de lugar y la mire – ¿no quieres que te ayude hacer el desayuno? – le sonreí mientras seguía mirándola

-no sabes cuánto te lo agradecería, sería lo mejor que puedes hacer –me miro sonriente. Tome un kiwi y comencé a pelarlo mientras Jinny picaba fresas, y las depositaba todas en un tazón grande de vidrio

- ¿Qué vas hacer para el desayuno? –pregunte mientras continuaba picando rodajas delgadas del kiwi

- ensalada de fruta con tostadas y mermelada de naranja –dejo de picar las fresas y fue directo a poner el café en la cafetera

-y ¿le pondrás yogurt? – tome otro pedazo de la misma fruta que picaba hace unos segundos atrás y continúe asiendo lo mismo al igual que ella

-no solo la pondré toda junta en el recipiente y listo –

-bueno es suficiente para mí  -sonreí al igual que ella

- ¿oye por que estabas enojado ayer? –levanto una de sus cejas mientras tenía su sonrisa de lado

-¿enojado yo? –es increíble que se haya dado cuenta de mi enojo, se supone que nadie lo noto; pensé que avía disimulado muy bien

-vamos Tom soy tu mejor amiga y tu mi mejor amigo, puedes confiar en mí –tomo mi mano, Jinny tenía razón ella era mi mejor amiga siempre tenía las mejores palabras para hacerme sentir bien

-bueno ¿te acuerdas de (Tu Nombre)? –la mire mientras asía un gesto con mi boca

-si ¿Qué tiene? – solo la mire fingí una sonrisa –no… ¿te gusta? –soltó el cuchillo y coloco sus manos en la barra

-sí  y no sé por qué, pero es diferente, cuando estoy con ella no me preocupo de nada es como estar contigo pero con la gran diferencia de que me gusta y me dan ganas de… besarla –

-bueno y todo eso ¿qué tiene que ver con que estés enojado? –me miro fijamente y ahí recordé todo lo que paso en el parque de diversiones

-la vi con otro chico y estaban muy felices –

-oooooh… pero vamos Tom no te dejes vencer ¿Por qué no le llama y la invitas a salir? –me sonrió, eso aria la invitaría a salir, justo en ese momento entraron los chicos y ella los corrió.